El alma de la fiesta. Mariposa social. Parlanchín. No son descriptores que normalmente se asocian con los profesionales de tecnología. Cuando la mayoría de la gente piensa en los técnicos, imaginan a Bill Gates en su juventud. Torpe, nerd y así.
Gates estaría de acuerdo con esos adjetivos. Durante una sesión de Reddit AMA el año pasado, dijo que si pudiera retroceder en el tiempo fortalecería su autoconciencia y sus habilidades interpersonales, deshaciéndose de su geek juvenil para convertirse en una personalidad dinámica.
Si eres un emprendedor del mundo de la tecnología, tómate sus palabras en serio. La inteligencia emocional y la empatía se ven como rasgos de unicornio en el sector tecnológico, y algo que veo con demasiada frecuencia como vicepresidente de una empresa de tecnología.
Ser audaz y relacional no siempre es natural para las personas que dirigen empresas de tecnología. Tomemos el ejemplo de Elon Musk. En una entrevista de CNBC, su amigo de la universidad, Navaid Farooq, describió la inclinación de Musk por concentrarse tanto que los estímulos externos no lo inmutaban. Musk claramente lo ha hecho bien a pesar de su perspectiva única y tuits extrañamente poco convencionales. Pero las superestrellas de la tecnología ahora necesitan algo más que habilidades de codificación para tener éxito.
Por qué los líderes de la industria tecnológica tienen que conectarse
¿Qué ha cambiado desde las décadas en las que Bill Gates saltó torpemente a la fama? ¿Por qué es ahora mucho más difícil que antes para los introvertidos de tecnología liderar y tener éxito basándose únicamente en sus credenciales?
Por un lado, cada vez nos damos más cuenta del gran impacto que tiene la tecnología en nuestras vidas. ¿Y quién tiende a tener más acceso a todo, desde secretos comerciales y registros financieros en las organizaciones? La tecnología, por supuesto.
Las empresas y sus clientes deben confiar en sus socios técnicos. La confianza no solo proviene de la experiencia, sino también de la capacidad de fomentar conexiones más profundas con otras personas. Por esa razón, los líderes deben comprender las necesidades de los demás y actuar de una manera que haga que su yo auténtico esté abierto a los demás, incluso si ese no es su estilo de comunicación natural. A continuación, se muestran algunas formas de comenzar:
1. Acepta la importancia de entablar relaciones
Los líderes de empresas tecnológicas están acostumbrados a lidiar con lógica y fórmulas. Aunque las relaciones no son necesariamente lógicas, tienden a seguir ciertas normas. Por ejemplo, aprender sobre otra persona y luego interesarse en lo que dice la persona es una forma natural de forjar una conexión.
Esto requiere escuchar y aprender a descubrir qué es importante para el otro individuo. Hay todo tipo de formas de establecer conexiones. Puedes hablar sobre el equipo deportivo favorito de la otra persona, sus intereses fuera del trabajo o su familia. La relación se fortalecerá a partir de ahí.
2. Replantea la venta como una experiencia de amigo a amigo
En el mundo empresarial actual pedirles a los líderes de la industria tecnológica que realicen llamadas de ventas y cierres. Puede sonar horrible al principio, pero vender no tiene por qué ser difícil o incómodo. Empieza por conocer a tus prospectos. Siempre digo: "Vende algo como si se lo estuvieras vendiendo a tu hermano o hermana".
Actúa como un asesor de confianza, cumpliendo cada vez que digas que harás algo. Esto crea camaradería, que lamentablemente falta entre los consumidores y los proveedores de tecnología a la luz de los informes sobre el uso de datos poco éticos, las violaciones de seguridad y los supuestos abusos de poder. Ser responsable y digno de confianza debe ser siempre una prioridad para los emprendedores de tecnología.
3. Evita pensar en las relaciones como transacciones
En los negocios podemos quedarnos atrapados pensando que todo debe tener un final. A veces eso es cierto, pero a menudo no. Está perfectamente bien tomar un café o una cerveza con alguien que no haya firmado un contrato con tu empresa. Hacerlo muestra tus verdaderas intenciones y, por lo general, derriba un poco sus muros.
Necesitarás moderar la parte competitiva de tu personalidad para realizar este tipo de cambio. Es posible que no comprendas de inmediato por qué debes prestarle atención a alguien que no muestra signos de querer comprarte, pero simplemente debes mantener el rumbo. Las relaciones son un juego largo.
4. Brilla durante los momentos imperfectos
La vida no siempre es tranquila. Los fallos ocurren. Cuando algo sale mal y hace que un cliente se sienta ansioso, enojado o confundido, da un paso al frente. Tu instinto natural podría ser retirarte a su caparazón para evitar conflictos; lucha contra eso poniéndote a la altura de la ocasión.
Muchos emprendedores pierden momentos clave para sorprender a los clientes que amenazan con irse. También es más fácil de lo que piensa convertir a un cliente malhumorado en un fanático. ¿Qué querrías si estuvieras en el lugar del cliente? ¿Cómo puedes darle eso al cliente? Como revela la investigación de Harvard Business Review, simplemente responder a los clientes irritados puede evitar que se vayan, incluso si no les ofreces nada más que tu tiempo y comprensión.
Ser un emprendedor tecnológico ya no es un trabajo "oculto". Ahora se espera que estos hombres y mujeres de negocios den charlas, asesoren a los miembros de su equipo, encabecen proyectos y aconsejen a los clientes. Concéntrate en desarrollar tus habilidades interpersonales y probablemente descubrirás que superas las expectativas de todos sobre cómo debe actuar un líder en tecnología.